Al hilo de lo tratado en el Tema 3 de nuestra asignatura Sociología para 2º de Bachillerato, veo hoy en los medios de comunicación un ejemplo que cabe sumar a los ya presentados en clase acerca de cómo el entorno y el contexto culturales modifican la forma en que percibimos la realidad.
Al margen de que nos gustaran más o menos, los payasos han sido siempre -o intentado ser- personajes amables y bonancibles. Sin embargo, al parecer lo peor que puedes imaginar hoy es encontrarte en una noche solitaria con un tipo vestido de esa guisa. Especialmente si lleva una pala o un hacha, claro. ![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEimwYXei5giJ8alSw6owvxb1SlpJLTITdtGxGNWfWe3C-avkY0ds7YMsJGGsN_3ZFY5F6pJ1L9zgasLmDHWqYh1G-ZhFfelGl98cNxZBPo70FsacD1ieFd9zIj4SpUCYnxOYHL8bJvUcnOP/s400/78484907.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiUGGh5F-o4Nyt2wxLhDbPWx6UJprdOV6jXemlzcTYLlJ8VHEz5GW0Hr1EmTpkI04KvG0BXNhol3AeI-2KwjU2wuntLKK-zyrCvPI-omgbBb9k4FYF0r912HtkwZXgBDSebiDkk3l6B-9NE/s320/hqdefault.jpg)